INTRODUCCIÓN
En este artículo profundizaremos un poco más en la necesidad de aprender a utilizar, de forma rápida y efectiva, los aparatos de control y verificación de los valores eléctricos y electrónicos en el reloj de cuarzo.
Los relojes de pulsera de cuarzo analógicos se componen de dos partes bien definidas: la parte electrónica y la parte mecánica.
Debemos aprender a discernirlas dos partes y definir, con agilidad y certeza, qué parte falla y dónde tenemos las averías.
Para la parte mecánica, es necesario un conocimiento teórico del funcionamiento, seguido de un aprendizaje del método o procedimiento de trabajo y, además, haber realizado horas de prácticas con las herramientas adecuadas para poder solucionar las averías que se nos presenten. En cambio, para averiguar cuál es la parte de la electrónica del reloj que falla, será necesario disponer de un aparato adecuado para medir todos los valores que el fabricante en su guía técnica nos señala.
Cursillista aprendiendo el manejo de los aparatos de control de averías
En el mantenimiento periódico del reloj, hay tres medidas que son imprescindibles en las operaciones básicas y que se deben verificar para poder garantizar las reparaciones o el mantenimiento.
Estas medidas básicas se refieren a:
- Tensión en voltios que se utiliza en el reloj.
- Intensidad de corriente en uA o consumo de corriente en el módulo.
- Resistencia eléctrica de la bobina del motor.
Lógicamente, para poder averiguar si las medidas están dentro de los parámetros que el fabricante recomienda como estándar; debemos utilizar los aparatos de verificación como los que se pueden ver en la fotografía adjunta al texto.
En nuestros cursos y con la ayuda del profesor, aprendemos de forma rápida y sencilla estas operaciones de control de medidas eléctricas y electrónicas así como la verificación de la buena marcha del reloj, haciendo uso del cronocomparador de frecuencias que el aparato lleva incorporado.
En resumen, después de asistir al curso de nivel D1, podemos asegurar que los objetivos generales del apartado relativo al control para el mantenimiento del reloj de cuarzo se cumplen holgadamente, siempre y cuando estas operaciones vayan seguidas de unas cuantas horas de prácticas.
Observación: Es conveniente repasar de forma habitual los procedimientos y el método de trabajo dado que, con el tiempo, se pueden olvidar conceptos muy importantes a la hora de calcular los costes de la reparación o mantenimiento.