Para realizar de forma adecuada la sustitución de elementos energéticos (como por ejemplo, la pila) en el reloj electrónico de pulsera, de cualquier tipo, es necesario mantener unos estándares de calidad y de buen hacer como en otras operaciones de mayor dificultad.
En ocasiones, el peor enemigo a veces del relojero es el exceso de confianza y, no por falta de conocimientos, sino a menudo por la poca importancia que se da a esta operación, que para nosotros sí la tiene.
Un buen método de trabajo consiste en aplicar el procedimiento adecuado en cada caso, lo que proporciona seguridad y rapidez a esta operación tan frecuente en el sector de la relojería.
La fotografía muestra el instante previo a iniciar la sustitución de la pila
En todo momento, es importante mantener el cristal del reloj protegido de posibles desperfectos que se puedan producir al manipular la pila y sus elementos de sujeción.
Muchas veces la tentación de tratar los relojes de precio asequible de forma diferente a los de precio alto, nos lleva a modificar el procedimiento aprendido y, con ello, a un posible fallo de manipulación. Para evitar que eso ocurra, siempre es mejor aplicar el método aprendido en el curso, para una mayor rapidez, eficiencia, y que es válido en todos los casos.
Los profesionales relojeros o los aficionados con colecciones propias pueden disponer de un stock de pilas siempre que tengan presente que, a la larga, las pilas caducan. Por tanto, mantener siempre el stock a punto es muy importante para garantizar una autonomía de marcha suficiente.
Observación: En el mantenimiento del reloj, siempre debemos dar la garantía conforme se cumplen las normas establecidas.
Para terminar y a modo de resumen, podemos decir que en la programación del curso de nivel básico D1, todas estas consideraciones y procedimientos que hemos descrito anteriormente se enseñan y se practican hasta la correcta asimilación por el alumno